La rosca de Pascua se puede degustar todo el año, sin embargo ahora es el momento más indicado para experimentar su sabor.
Se trata de una masa dulce, con varios ingredientes que realzan su exquisitez. Su preparación no es muy complicada y solo demanda unas horas.
Básicamente, la rosca es una masa de harina blanca, que va acompañada de huevos, mantequilla o margarina, azúcar, esencias y algunas que otras cuestiones propias de la preparación. Para levar, no puede faltar una buena levadura fresca o en su defecto, seca.
Las versiones de este alimento son varias y dependen a veces de la zona en la que se elabora, sin embargo el sabor puede llegar a ser único, si uno le agarra el punto deseado.
Algunas opciones de preparación abajo: